miércoles, junio 29, 2016

Tiempo Cotidiano IX


Hay una cuota de cordura en todo lo que estaba diciendo y escupía y escupía palabras, rápidas. Que con suerte hacia una pequeña pausa entre el cigarro y el vaso de cerveza. Como si se pusiera una trampa y tuviera que continuar, para no salir pillado. De cierto modo era un descanso para su mente. Solo actuar. Apagar el analizar todo, que era un tremendo peso. El ambiente esta ameno para ser un miércoles en la noche. El ruido de varias voces conversando, lo acomoda para poder tirar la verborrea y el poder hacer conexión, con lo que quiera que este diciendo o termine por decir.

No sé por qué terminé sentado con esta pareja, que hace solo un par de horas, está en Temuco. Vienen del norte. Son de Calama. Se vinieron a vivir al sur. Ellos insistieron en que me lees unieras. No pude decir que no dos veces.

Llevaban mas tiempo que yo en el bar. Estaban sentados detrás mío. Me vieron solo y la instancia que tuvieron para hacer contacto, lo hicieron. Acepte la segunda vez, aunque no quería. Conocer gente, siempre me es un poco latoso. Aburrido y sin sentido. Sobre todo cuando sabes que (la relación) no van hacer duraderas. El conocer gente porque sí… no sé, talvez he estado bailando con la fea, por un tiempito. En este caso eran dos personas, que acababan de llegar a Temuco y que salieron a un bar, a cachar la escena temuquense. Probablemente hayan viajado juntos. Ver donde se van a quedar y etc, etc. Me dio la impresión que ya no sabían de que mas hablar entre ellos. El viaje es largo. De todas maneras fueron ellos lo que hablaban, mientras yo, solo intervenía con pequeños comentarios medios ácidos, que sacaba esa risa incomoda.

En un momento Daniel –así se llamaba – empieza a contar sobre un documental. Se trata de un trabajador de Sea world, que tenía sexo con un delfín.

-La wuea es que el tipo tenía sexo con esta… delfín, bueno, hasta que lo pillan y ahí, obvio que lo echan cagando, o sea que wuea, es que no podí.
- O sea, si se puede. – intervengo – Ahora que no se deba, es otra cosa.
- Si po, pero igual pitiao el loco. Bueno el wueón hablaba de que ellos tenían una relación y todo. Contaba que la había hecho correrse y wueas con lujo y detalle.
- Que wuea el loco. Algo sorprendida Karina – Solo un hombre tiene esas conductas tan primitivas.
- Hombres. Digo como si fuera obvio.
- Si que wuea.-  vuelve a comentar Karina-  es un animal.
- Casi cierto- intervengo- hay otro documental donde una mujer que estaba haciendo un experimento para la nasa, donde trataban de enseñarle ingles a unos delfines en los 60, confesaba después de un montón de tiempo, que igual tuvo una relación sexual. Ahora, creo que ella solo habla de que el se frotaba en ella.
- No sé, igual loca la mina. Comenta Karina.
- Bueno la cosa – continua Daniel – es que el delfín, perdón La delfín.
- Igual le podí decir delfina – interrumpe Karina.

Hay un pequeño juego de miradas entre ellos. Un poco de bullying y otro tanto de amor. – Bueno Delfina. Insiste Daniel – dejo de comer y se deprimió. Karina hace un sonido de ternura  y comenta que era obvio, que los delfines (animales) igual tienen sentimientos.
-La dejo pa la cagá a la delfina. Comento
- Demás que sí. Si igual los delfines son, uno de los animales, mas inteligentes.
- … y ¿qué más pasó?. –Pregunto. -¿se pudo recuperar de la ruptura?
-  Aaa claro. La cosa es que la delfina. Deja de comer  y no hacer nada mas que estar en la parte de debajo de la piscina gigante que tienen. - feeling blue pensé.- después de un tiempo, ya estaba toda desnutrida. La cosa es que no sé como, todo esto resultó ser todo muy mediático, Si que por ahí el tipo supo de la situación de la delfina o eso es lo que creo, no te voy a mentir. Si que el loco fue a verla, de civil. Llego por una parte que el publico tiene acceso a poder mirar a la piscina, donde estaba ella, ahí empieza a hacerle señas,  hasta que lo reconoció. Alguien del parque se dio cuenta que la delfina volvió a la actividad y ahí se percataron de que el tipo había ingresado. Llaman a los guardias  y lo tuvieron que sacar como con ocho hombres. Haciendo show. El tipo estaba descontrolado. La delfina al percatarse de que lo estaban sacando. Si que empieza a tomar vuelo y comienza a chocar contra el vidrio. Caos, la gente salió en pánico. Trataron de calmar a la delfina, pero ella no paraba de chocar su cabeza contra el vidrio, cada vez con mas fuerza, cada vez mas rápido. Track, track, track (Acompañado con el gesto con sus manos). Triza el vidrio y así se siguió dando contra el vidrio, hasta que se mató. Derrame cerebral o algo así. Su cerebro no aguantó más.
- Chucha –Digo – Se volvió crazy la delfina por el loco. ¿Qué wuea tu historia?
- Wueón, pero si es un documental. Es real esta wuea. Lo podí googlear y wuea
- Bueno de seguro tubo que ser un buen polvo o si no “crazy bitch” o ¿no?
- Bueno, si el wueón contaba que había hecho que se corriera
- Tal vez la hizo sentir cosas que ningún otro delfín la había…
- Hecho sentir. Termina la frase Karina y se caga de la risa

Luego hubo un pequeño debate si ese amor era correspondido y de cómo se manejo la situación, pero en un momento la conversación se distorsiona y hubo posturas sobre, genética, cromosomas. La palabra mamífero también fue nombrado. La posibilidad de tener relaciones inter-especies. Ya que hay algunos animales que son súper inteligentes y que tienen sentimientos y pueden amar. Yo me aseguro de que todos piensan que sería de lo mas bizarro, si se llegara a pensar en legislar las relaciones inter-especies. Ambos dos me dijeron al mismo tiempo “sería enfermo”. Después de eso seguimos en el mismo nivel de debate, en este horrible escenario. Mientras llega otra ronda, de cerveza y hacemos un salud, por cosas que, ya a estas horas son mas que inevitables terminamos yéndonos mas a la mierda en la conversación. La música ameno el silencio y algunos ya comienzan aplicar retirada del bar. Daniel cuenta que Karina es veterinaria, bueno estudiante. Que tuvo que convalidar, aunque no le tomaron todo, pero que aun así no se atrasaba. Luego me cuentan que ella en el primer año hizo un experimento de clonaciones de un tipo de ranas. Lo hacían crecer en frascos y se preocupaban de todo el proceso. Extractaban el material genético padre y de ahí podían hacer la clonación o eso fue lo que pude entender. Luego Daniel le insiste a que cuente su fase de doctor Frankenstein. Ella se avergüenza un poco, pero cuenta que ahí, en ese experimento, había alterado genéticamente el ADN de la rana, mezclándola con otras especies. Yo me sorprendo, pero ella continua diciendo que ninguna de sus creaciones pudo ver la luz, igual asbia que algunos eran científicamente imposible. Uno de ellos era ADN de una vaca con la rana. Solo quería probar a que se puede, el método. En principio, pero para nosotros era imposible. Luego contaron de que Daniel estuvo a punto de irse a España a ser un doctorado, que seguía con la línea que tenía en el magister, aunque nunca nombra de que trataba, talvez por que no pregunte o tal solo el había tenido esta conversación muchas veces. Un discurso. Fantasmas, que van a estar ahí. Karina dice que no se fue por la ex y se rié malvadamente. El solo pone una cara – Cosas que pasan. Dice Daniel, mientras toma un sorbo de su kunstman torobayo, que ambos están tomando. –Puta si… la cague, pero bueno, Algún día lo haré – y vuelve a tomar otro sorbo. No tengo porque ser adivino para saber que nunca lo hará. Conozco bien esa frase. La he escuchado a tanta gente, que con el día a día, no pueden con sus fantasmas de noche. Yo mismo la he dicho, tantas veces, que sabes que nunca lo harás, en el mismo instante que salen de tu boca. Bebimos en silencio por un rato. Yo les conté que no creo en las oportunidades únicas. Solo se les da (oportunidades) a las personas que están ahí. Aunque me refería de forma literal, pero no quise darme a entender, que lean el subtexto. La conversación continua y cambian el tema, cuando saco un pito. Daniel confiesa que ya esta borracho para fumar, se vuelve loco, asegura. Me aguante la ganas de hacer el mal e insistir – además tengo que trabajar mañana. Karina por otra parte me acepto, si que se lo paso, pero le da unas pequeñas quemadas y enseguida me lo pasa. Daniel dice que va a trabajar en una farmacia en Lautaro. Salto al tiro (como un yonky) y le digo – entonces podríamos sacar unos tramitas
- ¿Unos qué?. Me dice
- Tramadol
- ¿Te gustan esas wueas?. Algo sorprendido
- Bueno… como entre tantas otras cosas.

El se caga de la risa y me recomienda un ansiolítico que no logro distinguir que dijo. –esto con copete, la raja – dice Daniel. En eso llega la mesera y nos dice que el local va a cerrar y que tiene que cancelar la cuenta Nos tomamos lo ultimo y ya empezaron apagar las luces y la música. Solo quedan los porfiados. Intercambiamos teléfonos, por iniciativa de Daniel, me dice que me va a llamar, cuando estuvieran ya estuvieran instalados. “para tomar unas cervezas”.

Chao les grito, cuando nos alejamos en la esquina de Francia con avenida Alemania. Las noches se están poniendo cada vez mas heladas. Corre arto viento. Ya se esta viniendo el invierno.