jueves, junio 30, 2011
martes, junio 21, 2011
viernes, junio 17, 2011
Junio
Junio han sido largos, llenos de aires sureños, han sido largos, precisos. A tiempo. Con lluvia incluso, cosa que ya extrañaba, el frío esta y en el aire a cambiado el humor y accionan de otra forma, las casas aparecen, en junio y ojalá se mantenga por toda la primavera.
Estaba lavando la loza a eso de las 18.00 horas, cuando el atardecer agoniza, cubriendo gran parte do tonos amarillos, rojos, violetas, para finalmente pasar al azul. La noche y las tonalidades del pasado comienzan a cubrir la noche. por donde vivo, aún no se ha contagiado del futuro y en mi radio suena un disco de música del pasado, antes del gran jazz, cuando el blues era absoluto gobernante de memorias de estas horas, justo con las que estoy viviendo. Pero, que por las noches haya mucha risa inteligentemente ingenua, pero hasta el momento eso todavía no va a pasar, siempre llega puntual, pero siempre tarde. A tiempo. Los vecinos ya comienzas a proyectar películas de sus propias vidas, crean escenas rutinarias que yo las sigo, a veces me recuerdan a las películas de Bergman y yo sentado en primera fila con las luces apagadas disfrutando las poca visibilidad de las cosas, aunque la cocina ayuda, proyectando solo para ver las siluetas de las cosas a mi alrededor y de mi equipo suena tambien el soudtrack, representando el animo de la noche, las tristezas, lo rupturista de la estructura de la misma escena. a tiempo, nuevamente. que solo en la añoranza del pasado, de algo que ya fue, de junio y de tantas otras cosas.
Estaba lavando la loza a eso de las 18.00 horas, cuando el atardecer agoniza, cubriendo gran parte do tonos amarillos, rojos, violetas, para finalmente pasar al azul. La noche y las tonalidades del pasado comienzan a cubrir la noche. por donde vivo, aún no se ha contagiado del futuro y en mi radio suena un disco de música del pasado, antes del gran jazz, cuando el blues era absoluto gobernante de memorias de estas horas, justo con las que estoy viviendo. Pero, que por las noches haya mucha risa inteligentemente ingenua, pero hasta el momento eso todavía no va a pasar, siempre llega puntual, pero siempre tarde. A tiempo. Los vecinos ya comienzas a proyectar películas de sus propias vidas, crean escenas rutinarias que yo las sigo, a veces me recuerdan a las películas de Bergman y yo sentado en primera fila con las luces apagadas disfrutando las poca visibilidad de las cosas, aunque la cocina ayuda, proyectando solo para ver las siluetas de las cosas a mi alrededor y de mi equipo suena tambien el soudtrack, representando el animo de la noche, las tristezas, lo rupturista de la estructura de la misma escena. a tiempo, nuevamente. que solo en la añoranza del pasado, de algo que ya fue, de junio y de tantas otras cosas.
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